Fue en la época del Guru Arjan Dev Jee
(5º Guru). Los Sangat (Devotos) iban de Kabul (Afganistán) a Amristar
para la Darshan (Visión de la Luz Divina/ con obediencia y respeto) de
Gurujee. Se encontraron con un Sikh y su esposa en el camino. Este Sikh les
hizo mucho sewa a los sangat. Masajeó sus piernas, les hizo aire mientras
ellos descansaban, les trajo agua, hizo de todo. Al día siguiente ellos
continuaron camino a Amristar con el Sikh. Cuando llegaron a Darbar Sabih, el
jathedar (el guía) de los Sangat (devotos) de Kabul pidió a unos
cuantos muchachos que cuidaran del calzado de todo ellos. Ninguno de los muchachos
se mostró dispuesto a hacerlo, ya que todos ellos estaban ansiosos por
ser los primeros en ver a Gurujee. Al final el sikh se adelantó y dijo
que él lo haría.
Los Sangat entraron y estuvieron esperando durante 30 o 45 minutos, pero Gurujee no apareció. Entonces el jathedar se adelantó y le preguntó a Baba Buddha Jee dónde estaba Gurujee.
Babajee, junto con el jathedar y el grupo de sangat, salió a buscar al Sikh. Lo vieron limpiando todos los zapatos con su propio chola.
Y no era otro sino el propio Guru Arjan Dev Jee
Baba Buddha Jee se adelantó y apartó el par de zapatos que Gurujee estaba limpiando. Babajee dijo: “¿Por qué estás haciendo esto?”. Todos los sangat estaban llorando. Gurujee sonrió y dijo: “Babajee, yo no he visto al Guru Nanak Dev Jee, pero tu sí. Echa un vistazo otra vez a este par de zapatos”. Babajee miró detenidamente el par de zapatos, y como él había estado con el Guru Nanak Dev Jee, inmediatamente se dio cuenta de que esos eran los zapatos del Guru Nanak Dev Jee.
Enseñanza del sakhi: ¡Cuando hagas Sewa, hazlo con el pensamiento
del que sabe quien está visitando el Gurdwara hoy! ¿Quién
sabe qué alma Gurmukh (Piadoso) ha venido hoy? Si estás limpiando
un par de zapatos de niño, ten en cuenta que podría pertenecer
a uno de los Sahibzaade. Si tú estás limpiando unos zapatos de
bibi, piensa que podrían pertenecer a Bibi Bhani. Si estás limpiando
unos zapatos de bhai ji, piensa que podrían ser de Bhai Bailo.
Durante uno de sus Udasis Guru Nanak Dev Ji Maharaj junto con Bhai Mardana ji visitó un pueblo donde la gente era muy mala y no prestaba ninguna atención a los valores espirituales o de honradez en sus vidas. Cuando estaban abandonando el pueblo después de algunos días, el Guru levantó su mano y bendijo a los aldeanos diciendo: “Vasde raho” (Que prosperéis).
Al día siguiente el Guru Nanak Dev Ji Maharaj, junto con Bhai Mardana
ji, llegó a otra aldea. En esta, al contrario que la gente de la anterior
aldea, sus habitantes eran amables, honestos y religiosos. Ellos rindieron respeto
y cortesía a Guru Nanak Dev ji. Guru ji pasó algunos días
allí cómodamente y más adelante se despidió de la
aldea.
Cuando se estaban marchando, a las afueras del pueblo, Guru Nanak Dev Ji Maharaj
levantó su mano de nuevo y dijo: “Ujad Jao” (Que tengáis
que desplazaros).
Al oír esto, Bhai Mardana ji se sorprendió. Le preguntó
al Guru porqué hacía eso. La respuesta del Guru fue sencilla:
Estas gentes son buenas y con grandes valores, si ellos abandonan la aldea y
van a diferentes partes del mundo, dondequiera que ellos vayan extenderán
esos valores entre la otra gente. Influirán sobre mucha gente que llegará
a ser buena y con valores (practicando el sangat). El mundo cambiará
para mejor. Mientras que la gente de la primera aldea no tenía valores,
por eso ellos deben vivir allí pues no son esos los valores que necesitan
ser extendidos.
¿Cómo puede la Sociedad de las almas santas ser conocida? Allí,
únicamente es recitado el nombre de Dios.
Para más información: Saadh Sangat http://www.gurbani.org/webart23.htm
Una vez en el darbaar de Guru Gobind Singh jee, un sikh llamado Laal Singh llegó con un escudo. El había dedicado mucho tiempo a la fabricación de ese escudo al que era prácticamente imposible atravesar. No tan solo era fuerte sino también muy ligero. Todos los allí presentes elogiaron el dhaal (escudo) y también Guru Sahib expreso su aprobación al dhaal.
Bhai Laal Singh era muy buen sikh, pero al ver tanta gente alabando su escudo, se despertó su “haume” (ego) y dijo en el sangat que ninguna bala podía penetrar su escudo. El lo dijo en un tono egoísta. Tan pronto hubo dicho esto, Guru Sahib le dijo que él podría probar el escudo de Laal Singh al día siguiente. Bhai Laal Singh no se percató de su error y aceptó el desafío diciendo que ninguna bala podría atravesar su escudo. Pero justo cuando estaba saliendo del darbaar de Guru Sahib, se dio cuenta de que había metido la pata. Se dijo a sí mismo que Guru Sahib era un famoso guerrero y además de eso era SatGuru. ¿Qué podría impedirle atravesar su escudo? Se arrepintió de su error y llegó a su alojamiento muy deprimido. Aunque él se había dado cuenta de su error al desafiar al sangat, aún así quería que Guru Sahib guardara su honor sin dejar que nadie rompiera su escudo.
Consultó a sus amigos que también eran Gursikhs y les preguntó
qué debía hacer. Les dijo que Guru Sahib podría, sin ninguna
duda, atravesar su escudo. Le sugirieron que la única manera de salvar
su honor era realizar Ardaas delante de Guru Sahib. Bhai Laal Singh preparó
el “Degh” (Karaah Parshaad) y junto con otros Gursikhs realizó
Ardaas ante WaheGuru para salvar su honor. Bhai Laal Singh no durmió,
estuvo rezando toda la noche. Al día siguiente Bhai Laal Singh llegó
con humildad al darbaar de Guru Kalgidhar Paatshaah. Después del bhog
(conclusión) de Kirtan, Guru Sahib le preguntó a Bhai Laal Singh
si estaba preparado para probar su escudo. Bhai Laal Singh no aceptó
el desafío, como había hecho el día anterior, pero le respondió
muy humildemente a Guru Sahib. Éste le dijo a Bhai Aalam Singh que primero
tenía que probar el escudo. Bhai Laal Singh permaneció allí
de pie con el escudo, sin parar de hacer naam y paath. Bhai Aalam Singh lo intentó
tres veces pero la bala erraba el tiro y no golpeaba el escudo.
Entonces Guru Sahib, sonriente, cogió el arma y apuntó al escudo.
Guru Sahib simplemente permaneció allí pero sin disparar. Al cabo
de unos momentos dejó de apuntar y le preguntó a Bhai Laal Singh
qué había estado haciendo toda la noche. Bhai Laal Singh se postró
a los pies en posición de loto de Guru Sahib y le contó todo.
Guru Sahib bendijo a Bhai Laal Singh y declaró que, realmente, nadie
podría penetrar el escudo a no ser el mismo VaheGuru y todos los Gurus
estaban dispuestos a proteger el escudo. Guru Sahib le dijo a Bhai Laal Singh
que nunca hablara con soberbia.
Los Sidhi Sadhus son una secta de ascetas. Generalmente viven en las altas
montañas. Creen que la salvación puede ser alcanzada torturando
el cuerpo.
Guru Nanak Dev era un incansable viajero. Después de recorrer grandes
extensiones en las planicies de la India, se dirigió a sitios importantes
en las montañas del Himalaya. Mientras viajaba por estas montañas,
Guru se encontró con un grupo de ascetas conducidos por Gorakh Nath.
Al principio ellos se sorprendieron al ver al Guru a esa altitud de 6.000 metros.
Quisieron humillarlo en un debate sobre la filosofía de la vida. Pero
no pudieron (fracasaron). Guru Nanak tenía mejores argumentos que ellos.
Algunas de las preguntas y respuestas de las discusiones que tuvieron fueron
las siguientes:
Finalmente decidieron impresionarle con el poder de sus milagros. Le dieron al Guru un bote vacío y le pidieron que lo llenara con agua de un depósito cercano. El Guru fue hacia allí, pero volvió con las manos vacías. No se distrajo con las perlas y diamantes que por allí había.
El Guru dijo: “Lo siento. Allí no había agua”. Y se avergonzaron al oírle decir: “He ido en busca de agua. No me interesaban en absoluto los diamantes”. Ellos se convirtieron en discípulos suyos.
Guru Nanak Dev ji, sabiendo que estaba próximo el momento de abandonar la tierra, señaló a Angad Dev ji (antiguamente bhai Lehna ji) como sucesor suyo. El 2 de Septiembre de 1539 (2 Asu, 1596 Asu vadi 5) Guru Nanak puso a cinco Paise ante Bhai Lehna y se inclinaron ante él en señal de reconocimiento Guruship. Guru Nanak colocó la sombrilla de la Soberanía Espiritual sobre la cabeza de Bhai Lehna.
“La Luz Divina es la misma, el Camino y el Modo el mismo. El Señor únicamente ha cambiado el cuerpo.”
Cuando Guru Angad fue investido como Guruship, la gente/sangat se dio cuenta de que Guru Nanak pronto abandonaría físicamente este mundo (Como Luz Divina y Espiritual, el Guru siempre está presente). Los Sikhs, los Hindúes, los Musulmanes venían de todas partes por la sagrada bendición de Guru Nanak.
Los devotos musulmanes, según la tradición musulmana, querían enterrar el cuerpo de Guruji, mientras que los hindúes, según su tradición, querían quemar su cuerpo.
Cuando le preguntaron a Guruji cuál era su decisión sobre esto,
el contestó:
“Dejad que los hindúes pongan flores a mi derecha y los musulmanes
a mi izquierda.
Aquellos cuyas flores permanezcan frescas por la mañana, podrán
disponer de mi cuerpo como ellos quieran.”
El Guru se tapó con una sábana. Cuando a la mañana siguiente se quitó la sábana, no había nada debajo, sólo las dos filas de flores, todas frescas. La luz se fundió con la Luz y el espíritu volvió a mezclarse con el Espíritu del Señor.
Los hindúes y los musulmanes quitaron sus respectivas flores y partieron la sábana en dos. Los primeros quemaron su mitad y los segundos enterraron la suya.
'Baba Nanak Shah Faquir; Hindu Da Guru, Musalman Da Peer'
“Gharib Da Muh-Guru Ki Golak”
La boca del hombre pobre es el tesoro del Guru.
Guru Har Gobind ji visitó en una ocasión Kashmir. Allí
vivía su fiel seguidor Sewa Das que siempre estaba deseando servir a
su Guru. Sewa Das vivía en la ciudad de Srinagar (capital de Kashmir
), donde el Guru planeaba ir. Un día, sin embargo, otro fiel seguidor,
Kattu Shah, se encontró con el Guru y le pidió que se quedara
con él en su casa de campo durante algunos días. El Guru le prometió
quedarse con él a la vuelta. Le aconsejó a Kattu Shah que hiciera
sus oraciones a Dios y que ayudara a los necesitados. Kattu Shah era muy leal
e hizo todo lo que el Guru le había dicho.
Un día un grupo de peregrinos, en su camino para ver al Guru, hicieron
un alto en la casa de Kattu. Éste les dio agua y les honró con
Sewa. Hizo todo lo que estaba a su alcance por los Sangat. Él mismo,
Kattu, estaba hambriento y se percató de que los peregrinos llevaban
un tarro de miel para el Guru, les pidió que se la enseñaran.
Cuando estos lo hicieron, Kattu preguntó si podía coger un poco
con el dedo para probarla, pero los peregrinos se negaron diciendo: “No
podemos ofrecerte de esta miel porque es para el Guru, y no vamos a darle a
él lo que a ti te ha sobrado”.
Al día siguiente los peregrinos llegaron al campamento del Guru y le
dieron su ofrenda. El Guru miró el tarro de miel pero no lo aceptó,
diciendo: “Os he pedido en el camino, pero me lo negasteis.” Esto
sorprendió mucho a los Sikhs, que se disculparon y le pidieron al Guru
que les dijera cuándo se habían negado ellos a darle la miel.
Él les contestó:
“Escuchad amigos míos, el concepto de ofrenda es que aquellos que
más tienen, han de ayudar a los que lo necesitan. Las ofrendas que vosotros
me traéis son para el bien común. Dios quiere que nosotros ayudemos
a los necesitados y que compartamos con ellos. Con la ayuda de vuestras ofrendas,
Guru Arjan (5º Guru) creó un hogar para los leprosos en Tarn Taran
(Punjab). Dondequiera que encontréis a una persona necesitada, dejad
allí vuestras ofrendas y comprender que, de esta manera, ellos llegarán
al Guru. Las ofrendas que no llegan a los necesitados son inútiles.
Llevaros este tarro de miel, no sirve para el consumo humano, pues es el resultado de haber negado la ayuda a un necesitado dentro del cual esta el espíritu del Guru. Id a mi cocina y preparar un tarro de miel fresca y llevárselo a Kattu Shah en seguida.”
Todos los Sikhs se inclinaron ante el Guru y comprendieron la manera correcta de hacer ofrendas.
Guru Nanak se encontró una vez con un ladrón el cual, después de de escuchar el Kirtan, pidió Perdón a Guruji. Guru Nanak le pidió que no irrumpiera en las casas de los demás y que viviera una vida honrada. Cuando el ladrón pretextó que eso le era imposible de cumplir, ya que él no sabía hacer otra cosa, Gur Nanak le sugirió lo siguiente:
Cuando el barón, al día siguiente se percató de lo ocurrido, para evitar que esto pudiera volver a ocurrir, juntó a todos los pobres de la vecindad y empezó a someterlos a una dura persecución para hacerlos confesar quién había sido el culpable de aquello. Al ver esto, el ladrón volvió a acordarse de las palabras de Guruji (No seas la causa del sufrimiento de los pobres) y para detener ese sufrimiento el ladrón se entregó él mismo al barón.
Este se sorprendió mucho al ver que el ladrón venía él mismo y se confesaba únicamente para salvar a los pobres. Le preguntó al ladrón por el motivo de dicha confesión y el ladrón le explicó toda la historia y la promesa que le había hecho al Guru Nanak Sabih ji. El barón se conmovió mucho y pidió conocer a ese Guru. Cuando se encontró con el Guru él también se reformó y desde entonces llevó una vida honesta y sincera.